Llegada la noche, las sombras hablan.
Llegada la noche, las sombras hablan es el primer libro con el que me he puesto las pilas, como decimos por aquí en México, y que he dado todo de mí para verlo publicado. Por ahora se encuentra disponible en las plataformas de Google y Amazon en formato Kindle; en Google pueden encontrarlo tanto en Google Play como en Google Libros y espero que dentro de un tiempo este disponible en formato físico.
Hay muchas ideas en mi mente en este momento de las que quisiera hablar sobre este libro que espero, como me imagino que lo desean muchos otros escritores, que sea el primero de bastantes más.
Escribir no es una tarea sencilla como la gente puede llegar a pensar y como yo lo llegué a creer en un primer momento. Escribir necesita de dedicación y de saber alguna que otra cosa para hacerlo de la manera correcta. Sí, no es necesario que conozcas a pies juntillas el nombre de cosas como metáfora o hipérbole u onomatopeya, quizá incluso ni siquiera es necesario que asocies esas palabras con sus significados, pero si es necesario saber manejar esas llamadas figuras retóricas. Quizá los más puristas se enojen conmigo al decir una blasfemia contra lo que considera una de las artes más puras que puede haber, pero en la realidad es así y sino que se le pregunto al diccionario: Escritor es el que escribe. Es así de simple, no hay que venir a cortarle las alas a los que sueñan con escribir un libro, pero sí hay que enseñarles lo duro que puede ser el camino en algunos casos. Y es lo que hay, no hay necesidad de memorizarse las reglas, pero si conocerlas y saberlas aplicar ¿Quieres escribir? Pues anímate a ello, escribe y lee; lee mucho pues es de la lectura de donde podrás sacar la mayoría de estos recursos, donde podrás comparar la prosa de un escrito con otra y adaptarla a tu estilo. Ten muy en claro esto, TU estilo.
No te mates con comparaciones sin sentido, no quieras hacer las cosas como, digamos, Stephen King, Carlos Ruiz Zafón, Agatha Cristhie, J.K. Rowlling o cualquier otro escritor por mencionar a los que me vienen a la cabeza en estos momentos, escribe como solo tu puedes hacerlo, a tu manera. Eso sí, toma en cuenta que si escribes por ti y para ti, pero también para los demás, un vistazo al diccionario no viene mal. Las redes sociales nos han hecho "ahorradores de palabras y letras", pero al momento de escribir un libro que piensas publicar es muy importante que cuides tus palabras, refiriéndome a que estén bien escritas, que el mensaje llegué a todo el mundo y no solo a los amigos con los que fraternizas por chat, para esto toma un diccionario, lee mucho y ten a la mano a un buen samaritano que sea capaz de decirte las cosas como son, que juegue el papel de lector cero y te marque los errores en tus escritos que a veces uno es tan ciego que es incapaz de verse los pies. Es eso, o si puedes permitírtelo, paga por un editor que corrija tu texto y si no tienes ni lo uno ni lo otro, confía tu espíritu y tus letras a las correcciones que un programa como Word pueda hacerte. Escribe mucho y lee mucho. No seas un ególatra y admite que también puedes equivocarte, admite ante ti mismo que quizá ese capítulo no sea tan bueno como crees, admite que quizá te pasaste un poco con las descripciones innecesarias, que quizá ese párrafo o esa frase no esta bien hecha y no se entiende por muy genial que pueda sonarte. Escribe tu texto y léelo y vuélvelo a leer. Solo toma en cuenta una cosa: "Un libro nunca esta terminado es solo que uno tiene que saber cuando parar".
Llegada la noche, las sombras hablan me enseño muchas cosas que yo daba por hecho que eran sencillas y quizá lo sean, pero bajo las lentes de alguien sin demasiada experiencia, sin suficiente dinero para pagar a profesionales en el tema y el suficiente coraje y, ¿por qué no?, la suficiente arrogancia para hacer las cosas por sí mismo, me ha supuesto en muchos términos un dolor en esa zona a la que no llega la luz del sol y en palabras más familiares si cabe, un dolor de cabeza.
Captura: Sinopsis de mi libro. |
En un primer momento, cuando uno escribe, no se le pasa por la cabeza la idea de lo que va a hacer después. Uno es poseído por las musas y escribe palabras, frases, oraciones, párrafos y hojas enteras sin pensar demasiado en el futuro. Cuando ese momento llega te das cuenta de que ninguna editorial va a llegar a tu puerta con un maletín con dinero, un contrato ni un lapicero azul para que firmes y des comienzo a tu carrera como literato novel. Esto es como ir a pedir trabajo, toca mandar solicitudes de empleo y esperar que el teléfono suene y que por obra y gracia del señor la voz del otro lado te diga: Ha sido aceptado.
Yo me he saltado buena parte de eso, pues no he tocado a las puertas de las grandes editoriales, y me he ido directo a lo que considero lo más fácil, publicar el libro electrónico. En mi mente se abrieron dos opciones: Google y Amazon. Una es una plataforma que ya había utilizado con anterioridad y me gustaba, la otra, Amazon, un mundo nuevo para mí y como todo lo nuevo y desconocido, un mundo aterrador. Es por eso que me decante por Google en primer lugar. En mi búsqueda por información para saber como proceder me tope con varios muros, el primero de ellos: La falta de información. He estado buscando algún vídeo en YouTube o algo más básico que me guiará en mi proceder, pero no he visto en nada así que mis niveles de temor se elevaron un poco.
Yo al momento de no encontrar info. sobre publicar en Google Books |
Captura: Llegada la noche, las sombras hablan (Google Libros) |
Escribir un libro no es tan simple como pueda parecer, se ocupan algunos conocimientos para ello, como ya lo dije antes. Auto-publicar, con las facilidades de hoy en día gracias a los avances de la tecnología, es más simple.
Si deben tener cosas en cuenta es que, al momento de publicar, será necesario en algunos casos tener pruebas de que son el autor de su obra, entiendo que los trámites con cualquier extensión del gobierno son engorrosos, pero si quieres hacer las cosas bien y rápido será mejor que te hagas con la titularidad de tu obra antes de publicar.
Escribir también es una experiencia grata y el hecho de que te lean hasta tus amigos da un gusto que no se puede igualar de alguna otra manera. Saber que has creado un libro y que habrá gente dispuesta a leerlo le sube a uno el ánimo, eso sí, que no se suba demasiado que luego pasa lo que pasa, uno siempre debe tener en cuenta de donde viene, como se suele decir.
Ya para finalizar mi perorata, algo más a tomar en cuenta es sin duda que, cuando uno auto-publica, debe hacerse cargo de todo. Y cuando digo todo es todo, desde los derechos de autor, el formato del libro, los gastos que puedan surgir a lo largo del trayecto y, al final, de darse a conocer que en mi experiencia es lo más difícil de todo el proyecto. Soy una persona reservada, soy introvertido y tímido a mi ver, a partes iguales; en mi caso debo enfrentarme a mis miedo sociales par dar a conocer mi libro y de algún modo vender aunque sea una copia. Gracias a la tecnología hay varias formas de darse a conocer por redes sociales y con su ayuda incluso podemos darnos a conocer fuera del mundo virtual, es cuestión de cada uno ver como se las ingenia para hacerse notar porque ni todo es bueno ni todo es malo, en el caso de la tecnología hablamos de un mundo que lee poco, que tiene poca atención y que, además, esta inundado de información de todo tipo por lo que hay que saber hacerse destacar. No soy el indicado par decirles que hacer, ni como proceder en este sentido porque sigo aprendiendo como muchos otros que se aventuran en este camino de muchas incertidumbres y retos. Hay que saberse vender y si no sabes hacerlo, como hago, aprende a hacerlo, se creativo e ingéniate de la mejor manera con publicaciones o contenido llamativo que destaque sobre los demás ¿De qué manera se hace? Supongo que igual que escribir un libro, con TU estilo.
Gracias por tomarse el tiempo de leerme, sin duda ha sido una entrada más larga de lo normal, finalizo con un invitación general a que lean mi libro Llegada la noche, las sombras hablan que espero sea un libro de su agrado; me apoyarían bastante si lo compran, pero al final son sus gustos y sus bolsillos los que deciden.
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